jueves, 17 de junio de 2010

Un Blog más, ¡como para qué?

Por: Óscar Rodríguez Nieto

Nuestro grupo de amigos de la narrativa, se reune mensualmente para conversar, tomar unos vinos y principalmente para leer los textos que escribimos. Todos pretendemos ser escritores de oficio y valoramos las opiniones de nuestros pares, especialmente si son amigos. Es una forma de obligarnos a producir y al mismo tiempo una disculpa para conocernos cada día más.
Hace algunos meses, en una de esas reuniones surgió una idea: ¿porque no establecer un blog en donde plasmar textos de reflexiones sobre la escritura y la literatura? Cuando se inicia un blog o diario virtual, aparecen las preguntas obvias como ¿habrá alguien que quiera leer lo que escribimos? ¿Tenemos algo novedoso o interesante qué decir? ¿nos robarán las ideas? ¿Y qué pasa si nadie escribe?
Todos estos temores se tradujeron en que terminaramos creando un blog cerrado en donde sólo nosotros pudieramos escribir y sólo nosotros nos pudieramos leer. Cada entrada en el Blog además se retransmitía al grupo de correo para que aún aquellos que no entrarán al blog la reciberan en el correo. sin embargo usar el blog para lo que sirve el grupo de correo los desvirtua
a ambos.
Propongo que abramos el Blog al público y nos arriesguemos a publicar nuestras ideas así estén en borrador y las vamos comentando y puliendo entre todos con la discusión.
Internet es la prueba irrefutable de que la anarquía funciona. En Internet las leyes de la oferta y la demanda (teroremas del bienestar decimos los economistas) conducen a un equilibrio justo cuando no hay restricciones para participar y la información es suficiente. El mundo virtual resulta mucho más eficiente que el mundo real porque acorta distancias entre los que interactuan en él. Allí es más fácil encontrar quén tiene lo que yo quiero y quien quiere lo que yo tengo. Los productos y servicios más extraños se ofrecen en Internet y existe quienes quieren comprarlos. por ejemplo: la compañía israelí Crazyshop está vendiendo parcelas en la luna y la tiene ya casi toda vendida
Desde el punto de vista del conocimiento y la creación artística, siempre habrá alguien que le interese los temas que nos interesan a nosotros, pero si no nos mostramos no nos van a encontrar.